Libro Dibujar el Movimiento por Peter Boerboom y Tim Proetel editorial "GGDIY" 192pags 15.5x21cms

Dibujar el movimiento es en realidad crear una ilusión visual de tiempo y desplazamiento.

Los métodos para conseguirlo son sencillos y muy numerosos, pero hay que conocerlos. Desde difuminar o desdibujar un fragmento de lo que estamos representando hasta jugar con la densidad del trazo o incluso con nuestra propia concepción de la fuerza de la gravedad. Peter Boerboom y Tim Proetel recogen en este compendio casi 200 ejemplos comentados de recursos gráficos para crear la ilusión visual de movimiento. Una guía para principiantes y profesionales que sin duda alguna se convertirá en un libro de necesaria consulta para experimentar con las infinitas posibilidades de representación del dibujo. Peter Boerboom y Tim Proetel, formados en arte en la Akademie der Bildenden Künste de Múnich, se dedican a la creación plástica desde múltiples vertientes, entre otras el arte, la fotografía y la didáctica.

Índice de contenidos:

Índice La ilusión del movimiento Rodar y caer Comprimir y estirar Crear ondas Dispersar Emborronar Difuminar Rastros Líneas cinéticas Desplazamiento Remolino Ritmo Posición Glosario Texto de la introducción: La ilusión del movimiento Aunque las líneas dibujadas no se modifiquen y las imágenes sean fijas, podemos llegar a ver en ellas movimientos, cambios o el paso del tiempo, tal como ocurre, por ejemplo, con los remolinos dramáticos de vida y muerte, de deseo y riesgo de las composiciones de Rubens; con la levedad de un velero en la materia cromática ondulante de J.

M. W. Turner; con la celebración de la velocidad de los futuristas o el choque de las rápidas pinceladas de la pintura gestual; con un Astérix en una carrera imparable o con las patatas volando por toda la habitación en las fotografías de Anna y Bernhard Blume. Detrás de las obras de arte no hay recetas fáciles. Sin embargo, la ilusión del movimiento se basa en principios lógicos y a menudo sencillos. Un dibujo surge a partir de distintos movimientos, sobre todo los realizados con la mano y la muñeca.

Las huellas que dejan esos movimientos no podrían ser más diferentes: la dirección, la velocidad, la presión y la energía quedarán plasmadas hasta el punto de poder descubrir cómo se originaron.

Las líneas que surgen de un impulso se distinguen de las titubeantes, de igual modo que los gestos firmes tienen poco que ver con un trazo inseguro. También puede existir el propósito gráfico de sugerir el movimiento de un objeto de un modo ilustrativo. ¿Cómo surge la idea de que aquello que está sobre el papel se mueve? ¿Cómo cambió la fotografía nuestra visión del movimiento al incorporar nuevas posibilidades de visualización? Quien conozca los métodos de representación del movimiento, no solo podrá ver las imágenes más allá de la superficie, sino que también podrá aplicar trucos que las impregnen de dinamismo.

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